Ramiro Buitrago Fuentes fue asesinado el 23 de enero de 2004 en la vereda Buenos Aires, corregimiento Plan de Armas, municipio Landázuri, Santander. Javier Buitrago García, su hijo, también fue víctima de homicidio el primero de septiembre de 2005. Han pasado más de 18 años y ninguno de los casos ha logrado avanzar en los tribunales de Justicia y Paz, y la investigación tampoco prospera en la Fiscalía. Estos crímenes siguen en la impunidad, como los de otras víctimas de grupos paramilitares que se acogieron a la Ley 975 de 2005.
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