Bogotá, 29 de septiembre de 2025. Recientemente,el Tribunal Administrativo de Cundinamarca revocó la sanción de inhabilidad impuesta a la exsecretaria de Integración Social de Bogotá, Teresa de Jesús Muñoz Lopera, en una decisión que dignifica su buen nombre y reconoce la legalidad de sus actuaciones durante la administración de la Alcaldía de Bogotá del ahora presidente Gustavo Petro.
La sanción, que inhabilitaba a la señora Muñoz Lopera por diez años para ejercer cargos públicos, se originó en una investigación disciplinaria de la Personería de Bogotá que cuestionaba la firma de un convenio de asociación, un régimen excepcional respaldado por el artículo 355 de la Constitución Política de Colombia, para la atención de personas adultas mayores en situación de vulnerabilidad.
El convenio, firmado con una organización de reconocida idoneidad, permitió la atención prioritaria de cientos de personas mayores con enfermedades mentales. La propia Personería reconoció posteriormente que este se ejecutó en su totalidad y que los recursos públicos fueron manejados de manera responsable, sin hallarse irregularidades ni desviaciones.
A pesar de que el convenio se ejecutó sin actos de corrupción, la funcionaria fue investigada y sancionada bajo el argumento de que debió haber usado las reglas de contratación pública —la Ley 80— en lugar de un convenio de asociación, que es un mecanismo excepcional, pero totalmente legal.
Como respuesta al recurso de apelación interpuesto por la señora Muñoz Lopera y sus representantes de la Comisión Colombiana de Juristas (CCJ), el Tribunal Administrativo de Cundinamarca falló a favor de la exsecretaria en una sentencia emitida el pasado 29 de agosto. La decisión judicial reconoce que el convenio se ejecutó correctamente y que cumplió con todos los requisitos legales; además, sostiene que la exfuncionaria estaba plenamente facultada para aplicar dicho régimen excepcional (convenio de asociación).
«La decisión que declara mi inocencia es justicia tardía, pero necesaria porque fui señalada, investigada y sancionada con diez años de inhabilidad por atender a personas mayores con problemas de salud mental; la misma Personería confirmó que no se perdió ni un peso», señaló la señora Muñoz Lopera como respuesta al fallo del Tribunal.
Esta decisión no solo revocó una sanción injusta, resultado de investigaciones disciplinarias de la Procuraduría General de la Nación contra varios exfuncionarios y exfuncionarias de la Bogotá Humana, sino que también sienta un precedente importante sobre la aplicación de los regímenes exceptuados de contratación en el sector público.
«No fui ni soy una exfuncionaria caída; soy una mujer política y una servidora pública honrada y revolucionaria, perseguida, vilipendiada y sancionada, que se levanta en justicia, que sigue en pie de lucha, que sigue con su proyecto social de “CUIdadanía: por un lugar, un saber y una oportunidad” para todos y todas. Y aunque sentí el dolor de la persecución jurídica, mediática y hasta física, la difamación, el dolor de mi familia y mi propio dolor, sepan que estoy aquí de vuelta». Teresa de Jesús Muñoz Lopera.
Comisión Colombiana de Juristas