Litigio internacional y contencioso administrativo

Corte IDH declara la responsabilidad del Estado colombiano por la desaparición forzada del soldado Óscar Tabares

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Bogotá D.C., 8 de agosto de 2023. Hoy, en una decisión histórica para Colombia, la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH) condenó al Estado por la desaparición forzada, hace 25 años, del soldado Óscar Iván Tabares Toro. Es la primera vez que se declara la responsabilidad internacional de una nación de las Américas por un crimen de estas características cometido al interior del Ejército.

El presidente de la Corte IDH, el juez Ricardo Pérez Manrique, anunció que el Estado colombiano vulneró los derechos al reconocimiento de la personalidad jurídica, a la vida, a la integridad y a la libertad personales del soldado Tabares, contemplados en la Convención Americana sobre Derechos Humanos; además, y teniendo en cuenta las afectaciones generadas al núcleo familiar de Óscar Iván, se declararon violados el derecho a la honra y dignidad, el derecho a las garantías judiciales, a la protección judicial y el derecho a conocer la verdad, así como los derechos a la integridad personal y a la protección de la familia.

Esta decisión surgió tras una audiencia pública que tuvo lugar el pasado 8 de noviembre de 2022 en la sede de la Corte IDH, ubicada en Costa Rica, donde después de 20 años de trámite en el Sistema Interamericano de Derechos Humanos se convocó a las víctimas de este caso, a sus representantes, a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) y al Estado colombiano.

 La Corte IDH determinó en su sentencia, entre otros:

1. la responsabilidad internacional por la desaparición forzada de Óscar Iván es atribuible directamente al Ejército colombiano;

2. la importancia del rol de la señora María Elena Toro, como mujer y madre buscadora, que entregó su vida a buscar a Oscar Iván Tabares y a honrar su memoria;

3. reforzar las acciones de búsqueda del joven soldado, por vías judiciales o administrativas, y la definición de un plan de búsqueda dentro de los siguientes tres meses; 

4. como medida de rehabilitación, el Estado deberá otorgar una suma de dinero para que las víctimas puedan procurarse la atención médica y psicológica que necesiten, debido a que las medidas contempladas en el PAPSIVI (Programa de atención psicosocial y salud integral a víctimas) no responden a las particularidades del caso.

Además, la Corte IDH ordenó medidas de reparación para la familia del joven soldado, entre las cuales se destacan:

• continuar las investigaciones y el proceso penal relacionado con la desaparición forzada de Óscar Iván Tabares Toro y la obligación de todas las instituciones de colaborar para su avance;

• publicar la sentencia y el resumen oficial; 

• realizar un acto público de reconocimiento de responsabilidad internacional. Allí deberá especificarse que Óscar no atentó contra sus superiores, no desertó ni se unió a las extintas Farc-EP. Además, debe mencionarse el impacto particular sufrido por la señora María Elena vinculado a su género y con motivo de la desaparición y búsqueda de su hijo, así como a la labor de otras mujeres que han tenido que emprender acciones de búsqueda de sus seres queridos víctimas de desapariciones forzadas;

• hacer un documental sobre la desaparición forzada de Óscar Iván y el impacto que esta tuvo en su familia.

Contexto del caso: ¿qué le pasó a Óscar Iván Tabares Toro?

El 28 de diciembre de 1997, María Elena se despertó a las 11:45 de la noche por una pesadilla relacionada con la muerte de su hijo. Entre septiembre y octubre de ese mismo año, Óscar había ido a visitar a su familia y le había contado a su mamá sobre las diferencias que tenía con sus superiores.

Soldados que estaban en el mismo campamento de Óscar, en la vereda San Luis de Toledo, municipio San Juanito, Meta, testificaron que durante la medianoche de ese 28 de diciembre de 1997 sonaron tres disparos y una granada. Después, no se supo nada más de Óscar Iván.

Días después de lo ocurrido, la familia de Óscar viajó a San Juanito para buscarlo. Cuando llegó al lugar de la explosión encontró su ropa interior; y debajo de una hojarasca había una carpa con un tiro a quemarropa, llena de sangre y esquirlas.

El 31 de diciembre de 1997, días después de la desaparición, el Ejército dio de baja a Óscar Iván de la institución castrense por supuestamente desertar y unirse al Frente 53 de las extintas Farc-EP.

En los más de 25 años que han pasado sin Óscar, la justicia penal militar desvió la investigación; la justicia ordinaria no ha avanzado en esclarecer lo que ocurrió ese 28 de diciembre en San Juanito, Meta, ni ha condenado a ningún responsable en el caso que cursa ante la Fiscalía. 

A pesar de ello, su familia no ha desfallecido en su búsqueda de verdad. Hoy, después de haber transitado un escabroso camino, reciben la condena del Estado colombiano con la esperanza de que este fallo les ayude a activar la búsqueda de Óscar Iván, a quien todavía esperan para darle un último adiós.

La Comisión Colombiana de Juristas espera que, como consecuencia del reconocimiento de responsabilidad que hizo el Estado ante la Corte, las órdenes de la sentencia sean cumplidas prontamente.

Comisión Colombiana de Juristas